OLIGOELEMENTOS
Término que está compuesto por oligo = poco; elemento = parte integrante de algo.
Son sustancias químicas que se encuentran en cantidades ínfimas (menos de 0,01%) en el organismo, su presencia es indispensable para la vida, el crecimiento de los animales y las plantas, asi mismo, tanto como la carencia como la abundancia de estos, resulta perjudicial para el buen funcionamiento.
Cada uno de ello con una función diferente y vital; los más importantes para el ser humano son:
BORO: Influye en el metabolismo de los nutrientes implicados en el mantenimiento de los huesos fuertes. La deficiencia nos pone en riesgo de sufrir de artritis y en exceso disminuye el conteo espermático del hombre.
COBALTO: Es el componente esencial de la vitamina B12 misma que actúa en el aprovechamiento de carbohidratos y grasas (las dos principales fuentes de energía de nuestro organismo). La carencia provoca deficiencia de vitamina B12 y en exceso sobre todo si es por inhalación experimentamos efecto en los pulmones desatando asma o neumonía.
COBRE: Se encuentra en los tejidos del cuerpo y ayuda en la formación de la hemoglobina y glóbulos rojos, facilitando la absorción del hierro y ayuda en la conversión de un aminoacido en un pigmento oscuro que da color a la piel y al cabello. La deficiencia causa anemia; El exceso lesiones del hígado.
CROMO: Aumenta la acción de la insulina y favorece la entrada de glucosa a las células. Su contenido en los órganos del cuerpo se va perdiendo con la edad. La deficiencia puede desencadenar un tipo de diabetes que la insulina no puede controlar y el exceso ocasiona daños en la piel y en el riñon.
FLUOR: Se acumula en huesos y dientes dándoles una mayor resistencia. Su deficiencia produce caries y problemas óseos, su exceso crea manchas en los dientes y excrecencia óseas de la columna vertebral.
HIERRO: Forma parte de la hemoglobina y de algunas enzimas. La deficiencia provoca anemia y disfunciones intestinales y en exceso lesiones de higado (Cirrosis).
MANGANESO: Interviene en la formación de los huesos, la formación de los tejidos y la coagulación de la sangre.
La deficiencia descadena pérdida de peso y retraso en el crecimiento del cabello y el exceso lesiones nerviosas.
MOLIBDENO: Ayuda a prevenir la anemia y las caries. La deficiencia, provoca pérdida de peso y retrasa la caida del cabello.
NIQUEL: Permite el buen funcionamiento del páncreas. Su deficiencia crea problemas pancreáticos y en exceso son muy extraños los casos pero por intoxicación laboral se a presentado neumonía aguda.
SELENIO: Conserva la elásticida de los tejidos. Deficiencia causa dolor y debilidad muscular, el exceso caída del cabello, y posible alteraciones nerviosas.
SILICIO: Es indispensable para la asimilación del calcio, formación de nuevas células y en la nutrición de los tejidos. Su deficiencia provoca la caída del cabello y la pérdida de elasticidad de la piel, y en exceso por inhalación causa enfermedades respiratorias.
YODO: Forma parte esencial de la hormona tiroidea que controla el crecimiento y el desarrollo. La deficiencia hace que se produzca aumento del tamaño de tiroides (bocio) y su exceso algunas veces ocasiona elevadas concentraciones de la hormona tiroidea.
ZINC: Interviene en procesos metabólicos como las producción de linfocitos, síntesis de proteínas y formación de insulina. Su deficiencia puede resultar en pérdida del apetito, ceguera nocturna, dermatitis, etc., y su exceso puede provocar problemas estomacales.
Los oligoelementos intervienen principalmente en la asimilación y metabolismo de los alimentos, en la renovación de los tejidos, en el refuerzo de las defensas del organismo (sistema inmunitario) contra las infecciones y ayudan a disminuir las reacciones alérgicas. Los oligoelementos permiten la conservación del equilibrio en nuestro organismo.
Para mantener el equilibrio de los oligoelementos en el organismo, es aconsejable una dieta balanceada y abundante en productos frescos.